La propuesta se sustenta en tres acciones específicas de proyecto:
Integración física con el contexto inmediato. Como primera estrategia, clave para la consolidación del proyecto como un lugar que articule las dinámicas sociales que ocurren en torno a él, se propone la integración a diferentes niveles del proyecto con su contexto inmediato. El más inmediato consiste en la integración entre el terreno del parque infantil, la cancha y la plaza abierta que da acceso a la cancha, mediante el manejo continuo de los suelos y a partir de la línea de sombra (pérgola y reja velada) que se extiende a lo largo de los muros norte y este del parque.
Recuperación de los valores paisajísticos del lugar. Enmarcado en las visuales hacia el Barrio José Félix Ribas (Petare Norte), a partir de la edificación de una pérgola en el lindero norte del terreno y el manejo del muro norte a través de mínimas demoliciones que enmarquen el paisaje.
Darle énfasis a los valores paisajísticos adyacentes: Para ello se propone rescatar el uso de la sombra de los árboles en el lindero sur del terreno (tanto dentro del parque cercado como de la plaza que da ingreso a la cancha). Adicionalmente rescatar el valor paisajístico de los bambusales existente en la extensión del parque adyacente al oeste del terreno; en este sentido, se optó por la reconversión poética del bambusal para convertirlo en postes lúdicos que, junto con troncos anclados al piso, se convertirá en un juego infantil ecológico.
Énfasis en el mobiliario lúdico y en la sombra. Para la edificación de los espacios de parque, se toman como referencia los detalles constructivos y policromía que han dado identidad a los “parques de bolsillo” de la Alcaldía de Sucre, con la idea de integrarlos a la memoria urbana del transeúnte a partir de la réplica de los elementos constructivos que identifican a un parque con el otro.