Maximización del espacio público. La carencia de espacio público existente en el barrio nos hizo pensar que el terreno donde se construirá el Parque Deportivo Mesuca debía ser una gran plaza. Es por eso que el edificio busca generar una sucesión de espacios públicos: plazas cubiertas, patio de agua, patios culturales, balcones, auditorios al aire libre, terrazas habitables, expansión de aceras y jardines, sumando un total de 9.698m2 de espacio público para Mesuca (20% por encima del área del terreno).
Aprovechamiento del terreno y su relación con el lugar. Con un 60% de ubicación y 140% de construcción, la distribución de las áreas permite un máximo aprovechamiento del lote. Utilizando además el programa como un activador de la calle y de las dinámicas del barrio, tanto en el uso de las zonas rentales (comercios) como a través del espacio público.
Arquitectura Tropical. Ya el maestro Villanueva nos asomaba al lugar de la sombra como el espacio del trópico. Un estudio de las condiciones climáticas (luz y ventilación) generan un espacio sostenible con el mínimo uso energético. Adicionalmente, el patio de agua, el corredor ventilado, el auditorio al aire libre y la plaza cubierta, incluso el uso del color y del arte, tienen un claro referente en la arquitectura tradicional venezolana con la imagen contemporánea que Mesuca se merece.
Gestión de Desarrollo. La suma de las áreas principales del programa en la ETAPA 1 de la obra (deporte, zona rental y área cultural) permitirán viabilizar el edifico mientras se gestiona la construcción de las siguientes etapas. La zona bajo la Plaza Mesuca será un espacio genérico cultural que se convertirá en estacionamiento una vez puedan ser trasladas estas áreas a la segunda etapa
Gestión Social. Se busca brindar oportunidades, porque “un niño puede escribir historias distintas si existe un centro deportivo que lo rescate” (MCI, 2007), como un mecanismo para que el edificio contribuya a la erradicación de la pobreza. Es por esto que la propuesta se centra en su programa desde la perspectiva social, de las relaciones que generan EL PODER DEL VÍNCULO entre el ciudadano y su posibilidad de desarrollo humano, porque “la pobreza no constituye necesariamente una situación limitante, si existe un contexto de oportunidades para narrar nuevas historias” (MCI, 2007), buscando “contextos que brinden la oportunidad de vincularse”, que permitan la narración de nuevas historias, mas allá de la pobreza.